Os militares e a tentativa de golpe no Brasil
Texto: Elaine Tavares
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O filme “SOLANAS EXPLICADO ÀS CRIANÇAS”, realizado pela Wallaroo Corp. em parceria com André Queiroz recebeu os seguintes prêmios no Festival de Cinema de Santo André:
Melhor Direção de longa metragem: André Queiroz
Melhor Ator de longa metragem: André Ramiro
Melhor Atriz de longa metragem: Dani Câmara
Troféu Ubuntu de Melhor Ator de longa metragem: André Ramiro
Melhor Filme de longa-metragem Júri Popular.
A produção Executiva é de Daniel Gravelli e Aimée Borges, a direção de André Queiroz e o roteiro de André Queiroz e Bento Vilela.
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“Pino es el nombre de la resistencia” se proclama en los primeros minutos del film de André Queiroz. Es parte de la explicación de porqué una pareja en una aldea de pescadores marítimos de Brasil eligió poner “Pino” a su hijo. Por allí había pasado Fernando Solanas y entablado una relación con el patriarca. Jugosas conversaciones comenta haber tenido y una chispa de insurrección haber dejado en ese paraje en donde algún día se prenderá alguna mecha rebelde.
Solanas Explicado às Crianças es un largometraje que pone énfasis en los protagonistas, sus emociones e ideas en pos de búsquedas insurreccionales por más libertad e igualdad. Y que va perfilando, ya que lo vemos crecer, a un “obrero de la liberación”: el pequeño Pino será el adulto que comandará la Asociación de pescadores que los sublevará, y a la aldea entera, en pos de una explotación digna de los recursos en contra de los agentes de contaminación. Ese pasaje, de la niñez a la adultez, se da en una secuencia muy interesante en la cual se proyectan imágenes de revoluciones y represiones a diferentes pueblos de América Latina. Los fragmentos de una buena cantidad de films de las décadas de 1960 y 1970 se suceden como material de archivo que incluso se proyectan sobre los cuerpos de Pino (Drew Montscho) y su padre (André Ramiro), quien le transmite a su hijo la memoria de las luchas y siembra en él el gérmen de la resistencia. Las palabras de un discurso de Fidel Castro cierran el legado: “Hablo en nombre de aquellos a los que se les ha negado el derecho a la vida”. Luego de esa magnífica secuencia, la continuidad está allanada para el desarrollo de la historia de Pino como militante pescador en su adultez (Paulo Guidelly).
La voz de Ana (Dani Cámara), madre de Pino, es la que urde memorias e historias del pueblo y de su familia en una cadencia agradable por la musicalidad de sus palabras. De esta manera la voz en conjunto con la puesta en escena, los encuadres (por momentos oscilantes) y la iluminación tenue nos sumergen en una experiencia poética con ribetes estéticos cuidadosamente elaborados. Por lo tanto, aquí se hace presente de forma natural el papel del director. André Queiroz resuelve con maestría esas distintas partes puestas en juego y coordina el concierto de esas diferentes instancias que nos hacen patente un rodaje cuidadoso.
Queiroz ya había estrenado Araguaia presente! (2018) y publicado los libros Rodolfo Walsh, a palavra definitiva. Escritura e militancia (2021) y Fernando Pino Solanas. Cinema, política, libertação nacional (2022), todos ellos fruto de investigaciones individuales o con su grupo. Especialmente el último de ellos, que tuvo su presentación en el evento Seminario Internacional Todo Solanas (IACS – Universidade Federal Fluminense, mayo 2022), condensa el arduo trabajo de investigación que Queiroz se dio sobre la obra, los escritos y el pensamiento de Solanas durante los últimos años. Bien, la conclusión de dicho recorrido es Solanas Explicado às Crianças. El cual está muy lejos de ser un film didáctico de la vieja escuela, es un acto poético en pos de dejar en pie la rebeldía en tiempos en los que la complacencia y el posibilismo están ganando la partida.
“Nuestro papel es luchar y resistir” dice el Pino pescador y activista. Y la asamblea ya está en marcha, desde allí no habrá regreso a un estadío anterior: todo será organización y lucha por mejores condiciones y respeto por los trabajadores. Las conversaciones entre Tito (el padre de Pino) y Jaime, un experimentado militante pesquero (interpretado por Rollo) se suceden en secuencias independientes en las que hablan en plano medio sobre las posibilidades de éxito de la aventura que está encarando Pino para movilizar a sus compañeros. Ellos reflexionan en base a tópicos históricos de lucha de clases, y pese a miles de batallas libradas están “vivos, firmes y fuertes” con el rumor del mar como colchón sonoro, siempre.
La anteúltima secuencia es magistral por el uso del recurso del plano secuencia. Entre onírica y real Ana espera a su hijo, se queda dormida, Pino la despierta en medio de la penumbra de la noche. Una luz tenue de velas entre imágenes religiosas y populares es el ambiente en que en los miedos de la madre y la convicción de lucha del hijo se presentan mientras la oscilación de la cámara en mano focaliza alternadamente en cada uno de ellos. Pino recita un poema de Manuel Bandeira, Ana le canta una canción de cuna. La potencia de esta extensa secuencia no se desvanece, entre ensoñación y requiem nos manifiesta que la revolución es un sueño eterno que se compone no solo de hechos sino también de ideas poéticamente expresadas.
Luego Pino, Tito, Jaime y sus compañeros toman maderas y gomas para quemar en la protesta. No es solo un llamado a la rebelión y la protesta tradicional, es una exhortación a mantener encendida la llama original que mueve nuestras pasiones como seres sintientes en medio de tanta decepción, cinismo y melancolía. No es necesario hacer un documental pedagógico que detalle los principios del pensamiento de Solanas para ser bien claro. La sutileza de este film de ficción abunda en enseñanzas con la suavidad de una caricia, pero con la persistencia de las olas del mar que siguen yendo y viniendo.
Pino y sus colegas, pero también André Queiroz y su equipo, nos invitan a compartir uno de los llamados más puros que la humanidad ha conocido: el de la dignidad popular. Señalando así al núcleo de las enseñanzas de Pino Solanas, aquel que nos indica que no todo está perdido mientras sostengamos la confianza entre nosotros en pos de un mundo mejor.
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Javier Campo es un académico argentino que se desempeña como investigador del CONICET. Es el presidente de la Asociación Argentina sobre Estudios de Cine y Audiovisual (AsAECA).
Texto: Elaine Tavares
Texto: Elaine Tavares
Texto: Gilberto Felisberto Vasconcellos
Texto: IELA